Adoradores:
Los adoradores del acrónimo
trataron de llevar la luz a toda la galaxia,
sembraron sombras,
cosecharon
odio.
Retiramos sesgos,
el velo en la cara no te deja ver,
¿acaso el pez ve el agua?
¿Cómo sonara el sonido del árbol que cayo y
no había nadie a su lado?
El arte de hacer visible tu costra.
El camino del peregrino es búsqueda.
Dolo sueño en altas bochas y en tolueno.
Ameno veneno comemos microplásticos.
Asmáticos cantando bajo el cielo cenizo.
Políticos en el piso por perros salvajes son
despedazados.
Vómitos de infiernos e inviernos de bebes
muertos,
esqueletos pequeños en teteras carmesí.
¿Será que dios mira por la mirilla del mundo?
El muy inmundo voyeur.
¿Será que el diablo era un tipo sabio?
¿Y el orate un santo? ¿Por qué no hay más profetas
desde que se inventó la psiquiatría?
Y que los años nunca vienen solos
y que los Solos nunca vienen sin un Chewbacca.
Rotos pero sensibles empáticos,
quemados pero no errados.
La tragedia de Prometeo es ser inmortal y
condenado a dolor eterno.
Solo el dolor enseña. ¿Sacas?
Generación de usar y tirar,
de la fragilidad, del copo derretido,
del culto al yogui y la moda de vacuo; del
deslizar.
¿Y si mañana cae la bomba acá?
Paradójico sentimiento del terrorífico momento
en que una especie se autoextingue en un
aliento.
Civilizaciones olvidadas en el canto de los
vientos.
The Tales of Hoffmann, 1951, Emeric Pressburger, Michael Powell.
Cadillac Records, 2008, Darnell Martin.
The Tales of Hoffmann, 1951, Emeric Pressburger, Michael Powell.
Cadillac Records, 2008, Darnell Martin.












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